Esta primavera como otras que han venido húmedas, son una gozada e incluso hasta un espectáculo, pasear por los terrenos en cultivo de olivar, donde el suelo viene siendo mantenido y conservado con una suficiente cubierta vegetal.

Este es el caso por ejemplo de gran parte de los terrenos beneficiados por la ejecución del LIFE+ EUTROMED. Uno de ellos es la Casería de Osorio en Campotéjar (Granada), que durante el fin de semana de primeros de mayo tuvimos la oportunidad de pasear por él, cotejando la eficacia de las técnicas de estabilización de cárcavas empleadas, la implantación vegetal lograda de forma natural o plantada, pudiendo contemplar en su conjunto un bello paisaje que se asemeja a un jardín agroforestal.

La primavera en los olivares bien conservados

Los trabajos de restauración sobre cárcavas de entre 0.50 m y 1.5 m se hicieron hace ahora cuatro años, empleando los modelos establecidos para el LIFE+ EUTROMED, empleándose para ello biorrollos de esparto y gaviones flexibles rellenos de piedra, y en algunos de los tramos planta de la especie Santolina chamaecyparisus como refuerzo de las estructuras.

Precisamente, la Santolina chamaecyparisus está demostrando gran capacidad de adaptación a este medio por su buena respuesta al trasplante, su resistencia a la sequía y su falta de apetencia por los conejos… uno de los grandes enemigos para el establecimiento de la vegetación en muchas de estas zonas. Además, las Santolinas chamaecyparisus realzan con su floración la belleza del paisaje, facilitando el establecimiento de otras especies vegetales hasta finalmente constituir un cauce de drenaje de las aguas de escorrentía natural, vegetado y controlando la erosión del suelo.

La primavera en los olivares bien conservados

Así la finca Casería de Osorio constituye un magnífico ejemplo de restauración de cárcavas y de mantenimiento del suelo en cultivos. Un ejemplo de esplendor durante la primavera en los olivares bien conservados.